Hallan dos genes modificadores del riesgo de desarrollar cáncer de mama y ovario
Aparece publicado en el último número de la revista “PLOS Genetics” un trabajo internacional firmado por 200 autores de 55 grupos. Liderado por el Centro Nacional de Investigaciones Oncológicasa (CNIO), el hallazgo de dos nuevos genes capaces de modular el riesgo de desarrollar cáncer de mama y ovario de las mujeres con mutaciones en los genes BRCA1 y BRCA2 muestra un mayor riesgo de desarrollar estos tumores.
Se trata
ahora, de crear un test con todas las
variantes genéticas que influyen en el riesgo de desarrollar un cáncer y a qué
edad, de tal manera que pueda hacerse un perfil personalizado para cada
paciente. Los defectos en estos genes pueden ser causa de miles
de mutaciones diferentes y el efecto de éstas puede depender de otras
variantes, como otros genes, y que puede referirse a una única base de entre
las 3000 que integran el genoma. Estos rasgos se denominan SNPs (polimorfismos de nucleótido simple) y no inactivan el gen ni
son patológicos pero puede ser importante cuando ya hay una mutación de riesgo.
Analizando
cerca de 2000 mujeres se han descubierto 11 SNPs que inciden en el riesgo, en
especial 2. Su influencia es solo del 1,12, muy pequeño, pero sí puede
incrementar el riesgo individual de padecer un cáncer en una mujer portadora de
una mutación.
Los SNPs descubiertos están
en dos genes, NEIL2 Y OGG1, justo
donde buscaron. Para ello, los
investigadores del CNIO validaron una hipótesis sobre el funcionamiento de
BRCA1/2 que les llevó a buscar en los genes de una de las rutas de reparación
del ADN. La célula
cuenta con varias formas de reparar su ADN, y en una de ellas participan los
genes BRCA1 y BRCA2 cuando son normales, sin mutaciones. En estos casos, si
BRCA1 y BRCA2 no cumplen su tarea por defectuosos, entra en juego otra ruta de
reparación, pero si ninguna de las dos funciona, la célula cancerosa muere.
Así, los autores lanzaron la hipótesis de que en esta ruta alternativa de
reparación podría haber SNPs moduladores de riesgo. Vieron que ambos
genes intervienen en la iniciación del mecanismo de reparación alternativo a
BRCA1/2 y además son genes básicos en eliminar de la célula los
productos tóxicos generados por el estrés oxidativo. El resultado
podría ser también de interés clínico, ya que uno de los tipos de fármacos
eficaces contra el cáncer de mama asociado a mutaciones en BRCA1 y BRCA2,
llamados inhibidores de PARP, actúan precisamente inactivando la ruta de
reparación alternativa. "Estos
hallazgos podrían tener implicaciones no solo para determinar el riesgo, sino
de cara al tratamiento de los portadores de mutaciones en BRCA1/2 con fármacos
inhibidores de PARP", han concluido.
by Miriam Rol García
No hay comentarios:
Publicar un comentario